Para el año 2010, el presidente electo Juan Manuel Santos en su discurso de posesión contempló la posibilidad de iniciar procesos de conversación para organizar un proceso de paz. Ese mismo año murió en un bombardeo el líder guerrillero de las FARC-EP “Mono Jojoy”, tras su muerte, la línea de mando de este grupo se vio debilitada (como el Comando Conjunto Central) y también la moral de sus combatientes.
El sur del Tolima en el Cañón de las Hermosas de Chaparral, se desplegó una ofensiva hacia este grupo guerrillero que se mantuvo hasta la firma de los acuerdos de paz. Así pues, el cañón era una zona de retaguardia guerrillera, servía para que los equipos de dirección militar de este grupo estuvieran en funcionamiento y también, como una zona de descanso después de las operaciones militares que realizaban.