En el marco de este año, las FARC-EP decidieron retomar el control en zonas y corredores que les permitían conectarse con el océano pacífico, esto bajo las directrices de su “Plan Renacer”. La intención era ocupar parte del departamento de Nariño y del Tolima, particularmente por la zona del cañón de las Hermosas. El Centro Nacional de Memoria Histórica en “Guerrilla y Población Civil” narra que ésta guerrilla se propuso mejorar las relaciones con las comunidades indígenas de la zona sur.
Entre tanto, a pesar de sus intenciones, en el municipio de Chaparral se vivenciaron hechos que marcaron a la población del sur del departamento, la estigmatización que victimizó a la mayor parte de los habitantes por causa de la confrontación entre la guerrilla y la Fuerza Pública en el marco del Plan Patriota, dio pie para realizar una marcha pacífica que tuvo la participación de aproximadamente 600 pobladores de los corregimientos de San José́ de las Hermosas, la Marina, San Antonio y el Limón.
Allí se realizaron bloqueos de vías hacia el casco urbano y a la zona de obras de la hidroeléctrica. Con esto, se llamó la atención de los medios de comunicación y las instituciones por la situación que soportaban las comunidades frente a las operaciones militares.
Otro caso en la Mesa de Transparencia por los Derechos Humanos en la Vereda Davis Janeiro, Acta III Memorias Asohermosas, donde denuncia Norberto Fernández: Se están presentando desplazamientos, la comunidad está dispuesta a hablar del tema. El rumor es que algunas familias se vieron obligadas a hacer acciones ya que no tienen escapatoria. El presidente de la JAC está dispuesto a hablar con el Coronel.